Etiqueta: Educador

  • Impresiones de campamento Alfonso B.

    Mi primer campamento no resultó del todo como me esperaba. Para empezar descubrí que estoy en peor forma que la que pensaba.
     
    Fueron días de trajín, de trabajar, de compartir vida. Fueron jornadas para aprender sobre uno mismo, mis aguantes y mis fuerzas, también sobre mis flaquezas…
     
    Entiendo que haya tantos muchachos que salgan contentos tras este tiempo intentando superarse día a día, entablando relaciones con los compañeros, animando, jugando al deporte, preparando los fuegos nocturnos… Haciendo vida de grupo. De tener yo su edad también lo viviría así, me figuro. Pero no la tengo, y por eso he podido ver otro lado del campamento; un lado más de educador.
     
    Y he comprendido que el campamento Santa María de la Montaña tiene una fuerte vocación, y una exigencia alta. ¡Buf!, era un ritmo fino. Y las cumbres de Gredos fueron un auténtico reto para mí. Os aseguro que pensé «realmente tiene que haber más que subir estos picos, porque si no, no vuelvo otro año», mientras subía fatigosamente. Pero, ¡aaah!, sí que hay más que «subir esos picos». Está el bajarlos con la satisfacción de haberlos coronado, contemplado el paisaje, compartido con los compañeros… está el dormir bajo las estrellas con el eco en derredor… está el bañarse en la laguna bien fresquita a primera hora de la mañana… están los ratos de fuego donde los chavales dejan sus almas volar… está la misa con María mirándonos, mientras estamos agarrados al peñasco que sobresale de la roca que es nuestro cimiento…
     
    Efectivamente, cuando pueda volveré al campamento. Y no solo a subir las cumbres de Gredos.
     
     
     Alfonso B.
    Madrid
  • El papel del educador.

    Éste es el espíritu del P. Morales en la formación de esos hombres llamados a ser fermentos en la masa, y éste es el espíritu que trata de inculcar a quienes han de ejercer de educadores:

    «Éste es el papel, osucuro y glorioso al mismo tiempo, del educador. Un filósofo francés, Lavelle, ha dicho: «El mayor bien que hacemos a los demás no es comunicarles nuestras riquezas, sino descubrirles las suyas». Ello supone que un educador sepa eclipasarse, saber ser todo y a la vez no ser nada».

    (P. Morales, Forja de Hombres 107)

    Sin embargo, también en esto se puede caer en reduccionismos y en simplificaciones demogógicas. Para que el educador pueda actuar como simple mediador, es preciso que en el educando se produzca la energía suficiente como para orientarse él mismo hacia el aprendizaje.

    Se argumentará que ese es precisamente el arte que ha de dominar el buen maestro: motivar al niño o al joven para que se genere en él una tendencia al aprendizaje. Mas si las cuerdas del querer (voluntad) del educando no están bien templadas, es inútil la habilidad del violinista para arrancar las mejores melodías.

    (Abilio de Gregorio, Por las huellas de la pedagogía del padre Tomás Morales)

    Mirando al horizonte.

    Los militantes de Santa María buscan la Verdad, el Bien y la Belleza en medio del mundo, los reflejos de la presencia de Dios, para llevar a sus semejantes al Amor, a la verdadera Vida.

    Canción: «Mirando al horizonte» (taller de música, Campamento de Santa María de la Montaña 2010) (la podrás descargar próximamente)

    Mirando al horizonte,

    tu alma se abrirá…

    al eco de los montes

    que invita a caminar…

    Llevando por el mundo

    lo justo para andar

    seremos savia joven

    que grita MÁS Y MÁS.